La mayoría de las personas creen que la neurocirugía se limita al cerebro, pero hay más. Esta especialidad médica se concentra en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con lesiones, enfermedades o desórdenes en el cerebro, la médula espinal y la columna vertebral, además de los nervios periféricos que recorren el cuerpo. Esta puede tratar tanto a pacientes adultos como pediátricos. Aunado a ello, y dependiendo de la naturaleza del problema, el neurocirujano puede recomendar un tratamiento no quirúrgico. Entonces, queda claro que la neurocirugía abarca más de lo mencionado al principio.
Concepto
La neurocirugía se desprende de la neuromedicina, que involucra el diagnóstico y tratamiento de desórdenes neurológicos y complicaciones por medio de medicamentos y métodos no quirúrgicos. En muchos casos, un neurólogo —que trabaja la neuromedicina— trabaja de la mano con un neurocirujano.
Un neurocirujano puede realizar procedimientos en el cerebro, la columna y los nervios de las extremidades. Trata pacientes de todas las edades, desde recién nacidos con anormalidades congénitas hasta ancianos que pudieron haber sufrido un derrame cerebral. La neurocirugía también se encarga del tratamiento de lesiones nerviosas, neuroblastomas, infecciones del sistema nervioso central y enfermedades neurodegenerativas.
Una parte importante del diagnóstico y la evaluación de los pacientes incluye el uso de imagenología —que también ha avanzado enormemente—, que comprende tomografías, resonancias magnéticas y angiografías.
La neurocirugía es una de las disciplinas más recientes en desarrollarse, haciéndose muy importante desde principios del siglo pasado. Hoy en día, se trata de una de las ramas médicas más avanzadas gracias a las tecnologías de las que echa mano.
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Procedimientos más comunes
Estas son algunas de las operaciones que más se realizan dentro de la neurocirugía:
- Craneotomía: microscopios quirúrgicos son utilizados para ayudar al neurocirujano a hacer aberturas que minimizan el daño en tejido cerebral durante la remoción de tumores.
- Neuroendoscopía: uso de endoscopios especializados con videocámaras de alta resolución para tratar tumores que se encuentran en lo más profundo del cerebro y la base del cráneo. Se trata de una cirugía de mínima invasión.
- Radiocirugía estereotáctica: tratamiento no invasivo para tumores que involucra la aplicación de radiación focalizada en una parte del cerebro.
- Laminectomía: procedimiento de mínima invasión en el que se hacen pequeñas incisiones en la piel para remover una diminuta porción de vértebra. Se realiza en pacientes que sufren de dolor de espalda severo.
- Fusión espinal: se emplea para tratar enfermedades degenerativas o lesiones en la columna. Su objetivo es mantener esta última en una posición estable.
- Microdiscectomía: se usa para tratar a personas que sufren dolor producto de una hernia de disco en el área lumbar.
- Ventriculostomía: durante esta cirugía, el neurocirujano usa tubos para remover el exceso de fluido del cerebro.
- Para tratar la epilepsia: si los medicamentos fallan, esta es la siguiente opción. Involucra la remoción de la pequeña porción del cerebro responsable de los ataques más fuertes.
Subespecialidades
Las principales son:
- Pediátrica: anomalías faciales, defectos congénitos de la columna y tumores.
- Neurooncología: manejo de tumores espinales y cerebrales.
- Funcional: manejo de condiciones como epilepsia, trastornos del movimiento y parálisis cerebral.
- Neurovascular: aneurismas complejos y vasos sanguíneos anormales o estrechados.
- Cirugía en la base del cráneo: trastornos o tumores en esta área.
- Cirugía de columna: tanto en jóvenes como en adultos mayores.
Referencias: NHS
OHSU
News Medical Life Sciences
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