Los especialistas disponen de las inyecciones epidurales como una opción para aliviar el dolor crónico en la espalda baja cuando es producto de ciertas circunstancias. Estos inyectan el medicamento antiinflamatorio en el espacio epidural alrededor de los nervios raquídeos. Se trata de una forma efectiva de lidiar con el dolor que provoca una hernia de disco o la estenosis del conducto vertebral.
¿Qué es?
Una inyección epidural es un procedimiento en el que se inyecta un medicamento —esteroide o corticosteroide— en la zona lumbar. Su objetivo es manejar el dolor crónico causado por la inflamación de las raíces nerviosas de la columna debido a condiciones o lesiones específicas. El dolor crónico —radicular— puede irradiar de la espalda baja hacia la cadera, las piernas y los pies.
También puede proveer anestesia en una región del cuerpo —las piernas, en este caso—. En algunas ocasiones, el alivio es corto, pero en otros puede durar más tiempo.
¿Cómo se aplican?
Debido a lo precisas que tienen que ser, solo anestesiólogos, cirujanos, radiólogos o neurólogos pueden aplicar inyecciones epidurales —el proceso toma de 10 a 15 minutos—. Existen diferentes maneras de administrarlas:
- Interlaminar: la jeringa sigue el camino que forman dos láminas de la columna para entrar al espacio epidural. Este método se usa para proveer alivio de dolor cuando hay una hernia de disco o estenosis del conducto vertebral.
- Transforaminal: el camino que sigue la jeringa es a través del foramen, que es una abertura por la que una raíz nerviosa sale de la columna. Este método se usa cuando hay una lesión específica.
- Caudal: la jeringa se introduce por el hiato sacro —ubicado en la parte inferior del sacro y justo encima del coxis— para alcanzar los nervios raquídeos inferiores. Este método suele tener menos riesgos que los anteriores. Se usa cuando existe el síndrome de la espalda fallida, que se refiere a cuando el dolor crónico no desparece después de una cirugía.
Un paciente sentirá un piquete presión, hormigueo, una sensación de quemadura y un poco de dolor durante la aplicación.
Preparación
Se trata de un proceso ambulatorio, por lo que el paciente sale el mismo día. Es usual que el área donde se vaya a aplicar reciba anestesia local. Es necesario informar al médico sobre alguna alergia y otras condiciones médicas. También es probable que el especialista pida una resonancia magnética o una tomografía para determinar el área exacta que debe ser tratada.
De igual manera, se recomienda limitar el consumo de líquidos y alimentos antes del procedimiento.
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¿Qué pasa después de la aplicación?
Si la inyección también tuvo de por medio anestesia local, el paciente sentirá las piernas pesadas. Podrá caminar, pero con cuidado. Después de que pierda efecto la anestesia, habrá dolor, y este se irá hasta que los esteroides comiencen a trabajar, lo cual sucede de uno a tres días después de la inyección. Algunos experimentan mareos inmediatamente después de la aplicación, pero los síntomas no duran demasiado.
Si el dolor lo permite, es posible retomar las actividades, pero se recomienda no forzar las cosas.
Mucha gente disfruta de los beneficios de este tratamiento durante meses, por lo que el procedimiento suele repetirse. También existe la opción de aplicarla nuevamente si no hubo gran mejora. Pero si aun así no hay cambios, lo ideal es hablar con el especialista para evaluar otra opción.
¿Cómo ayuda a tratar padecimientos de columna?
Las inyecciones epidurales ofrecen alivio temporal, lo que permite al paciente participar en ejercicios de rehabilitación, los cuales sirven como tratamiento para la causa raíz del dolor lumbar. La calidad regresa a su vida, pues este puede llevar a cabo actividades que el padecimiento le impedía. Además, las inyecciones reducen la necesidad de realizar procedimientos más invasivos, específicamente cirugías.
¿Cuándo se convierten en una opción?
Si el paciente experimenta un dolor intenso en las piernas o en los brazos a causa de un nervio inflamado, entonces las inyecciones epidurales se convierten en una opción para lidiar con él. Usualmente, los conductos por los que pasan los nervios que van desde la columna hasta los brazos se estrechan, lo que causa dolor. El estrechamiento también da como resultado la inflamación de los nervios raquídeos. Las hernias de disco, las vértebras desplazadas, los quistes articulares y el engrosamiento de los ligamentos de la columna —a causa de la artritis— también contribuyen a lo anterior. Las inyecciones epidurales de esteroides reducen la inflamación y abren estos pasajes, aliviando el dolor.
Efectos secundarios
Estos son algunos de los efectos secundarios que puede experimentar un paciente después de una inyección epidural:
- Problemas para dormir.
- Ansiedad.
- Dolor de cabeza.
- Alteración del ciclo menstrual.
- Debilidad en las extremidades.
- Retención de líquidos.
- En algunos casos, dolor que se incrementa con el paso de los días.
- En casos extremos, puede haber una reacción alérgica, sangrado, daño nervioso, infección y hasta parálisis.
Foto del encabezado: Apex Interventional Pain & Spine
Referencias: Cleveland Clinic
Healthdirect Australia
Johns Hopkins Medicine
Government of Alberta
